LA HINCHADA FIEL

viernes, 6 de enero de 2012

Equipos legendarios: Peñarol


Abbadie, Sacía, Moacír, Spencer y Joya, delanteros históricos


Los “carboneros” o “manyas” como también se conoce al cuadro uruguayo de Peñarol, fue el club más exitoso de su país en la década del 60 obteniendo 8 ligas uruguayas, 3 Copas Libertadores y 3 Copas Intercontinentales que lo convirtieron en leyenda de Sudamérica y hasta del mundo.

A principio de 1958 se inicia la época dorada peñarolense de la mano del técnico Roberto Scarone y figuras destacadas como Tito Goncalves, Cubillas, el gran arquero Luis Maidana, Juan Hohberg, Juan Romay y Julio César Abbadie, lograron conquistar el campeonato doméstico en dos oportunidades consecutivas (1958-1959). Pero el máximo esplendor futbolístico estaría por relucir y coincidiría con la llegada del ariete ecuatoriano Alberto Spencer, consiguiendo la primera y segunda edición de la Copa Libertadores de América al derrotar a Olimpia de Paraguay (1960) y Palmeiras de Brasil (1961) respectivamente.

Bajo la batuta del ecuatoriano ganaron la Copa Intercontinental (1961) al Benfica de Eusebio, a pesar de haber perdido el anterior torneo frente al Real Madrid. En el partido de ida cayeron por la mínima diferencia en Portugal y la revancha, jugada en Montevideo, los lusos se llevaron 5 goles al sufrir el poder “carbonero” de Spencer (2), Joya (2) y Sasía. Luego para desempatar fue necesario un tercer cotejo, en donde José Sasía dejó clara las cosas con un espectacular doblete e hizo impotente el tanto que Eusebio había realizado en el primer tiempo.

Durante el lapso de logros internacionales la institución obtuvo tres campeonatos caseros más (1960,1961 y 1962) y conquistó el primer quinquenio de su historia.         

 Con el lauro de la segunda intercontinental se despidió el DT Scarone, sucediéndole el austro-húngaro Bela Guttman, el mismo que se retiró a mediados de la temporada 1962 por motivos de salud dando paso al mítico Roque Maspoli.    

Luego de una temporada de transición  (1963) y adaptarse a un nuevo sistema de juego, los “carboneros” volvieron por sus fueros y conquistaron dos campeonatos uruguayos (1964-1965).

Tras el retiro del golero Maidana, surge una nueva figura en el pórtico “manya”: Ladislao Mazurkiewicz, que fue considerado por la prensa especializada como el sucesor del extraordinario arquero soviético Lev Yashin.

En 1966 Peñarol arriba a una nueva final de Copa Libertadores de América y se daría una de las definiciones más emocionantes de la historia del fútbol frente a River Plate de Argentina. La primera contienda se disputó en Montevideo y triunfó el cuadro local 2 a 0, en el segundo cotejo, jugado en Buenos Aires, ganó River Plate 3 a 2. El tercer y definitivo encuentro para romper las tablas debió jugarse en campo neutral y el Estadio Nacional Santiago de Chile, fue el escogido. River Plate se adelantó 2 a 0 a través de Onega (37’) y Solari (42’) y mantuvo el control del balón hasta el minuto 15, cuando un cabezazo de Spencer es parado con el pecho por el portero Carrizo y gracias a esa fanfarronada los jugadores peñarolenses sacaron amor propio y se le vino la noche a River anotando Spencer (67’ 101’) Matosas (72’) y Rocha (109’). Resultado final: 4 a 2. Los aurinegros levantaron su tercera Copa Libertadores de América.

 Y para cerrar con broche de oro la mejor etapa del club alcanzaron su segunda Copa Intercontinental (1966) frente al Real Madrid triunfando 2 a 0 en la ida e idéntico marcador en la vuelta contendida en el mismísimo feudo madridista, siendo el verdugo Alberto Spencer viendo puerta tres veces en los dos encuentros. Hasta la próxima.