LA HINCHADA FIEL

lunes, 30 de abril de 2012

Anécdota futbolística: Ramón Unzaga, padre de la “chilena”



Ramón Unzaga Asla, futbolista español - chileno

Fuente: Más que fútbol

El fútbol amateur primó  en la cola del continente americano, específicamente Chile, desde 1910 hasta 1924, pero en 1914, emergió la figura menuda de un futbolista español de apenas 20 años llamado Ramón Unzaga Asla. Jugaba como zaguero  y a él le debemos la invención de aquella acrobacia deportiva llamada “chalaca”, “tijereta”, “chorera” o popularmente conocida como “chilena” que consiste en pegarle al balón suspendiéndose en el aire de espaldas.

 Luego de debutar en el fútbol chileno, por el año de 1912 y hacerse un puesto en la historia de su equipo Estrella de Mar, perteneciente al Puerto de Talcahuano, Ramón obtuvo la naturalización y pudo jugar varios partidos como capitán de la selección chilena en los sudamericanos de Argentina 1916 y Chile 1920.

En sus primeros años fue un deportista que practicó múltiples disciplinas, entre las que se destacaron atletismo, boxeo, natación y obviamente el fútbol. Quizás por su contextura atlética y estilizada, para el rudo puesto de zaguero, fue lo que permitió a Ramón innovar dentro del fútbol.

Entre sus compañeros de profesión en Talcahuano ya era común la jugada vistosa de Unzaga, pero en el Sudamericano de Argentina 1916 fue donde obtuvo renombre internacional maravillando a los participantes de la cita continental: brasileños, argentinos y uruguayos que reprodujeron  la fama de esta elegante pirueta por el mundo.   

Hay que destacar que en Chile, antes de 1916, a la “chilena” se le llamó “chorera”, debido a que las bases futbolísticas de Chile salían de la región de Talcahuano, conocida coloquialmente como “Escuela Chorera” y en Argentina un grupo de periodistas “gauchos” la bautizaron con el gentilicio araucano. Hasta la próxima.

domingo, 15 de abril de 2012

Anécdota futbolística: Futbolistas fallecidos por muerte súbita




El fútbol es el “Rey de los Deportes” por excelencia. Origen de la alegría del hincha, pero también de su tristeza y tal vez sea esa amalgama que lo convierte en un deporte interesante.

A lo largo de los años en el fútbol han ocurrido sucesos vistosos y alegres, pero también trágicos como las muertes en el terreno de juego o días más tarde, luego de un cotejo, pero igual de dolorosas, porque cuando se escapa la vida no hay vuelta atrás y pesa sobremanera tratándose de un atleta aparentemente rebosante de vitalidad.  

La lista expuesta a continuación corresponde a futbolistas fallecidos trágicamente debido a una enfermedad congénita o adquirida que causaron conmoción en la élite futbolera:

Pedro Cano, futbolista español

El jugador bilbaíno de 33 años, llegó fichado al Novelda Club de Fútbol, de la Segunda División Española procedente del Club Toledo. Tres días después, el 20 de julio del 2002, luego de un entrenamiento rutinario, Cano se desplomó de repente ante el asombro de sus compañeros falleciendo en el acto debido a un edema cerebral, según los análisis posteriores.
Marcio Dos Santos, futbolista brasileño

Marcio Dos Santos

El 28 octubre del 2002 fue el último día en que Marcio Dos Santos, futbolista brasileño de 28 años, defendió la elástica del Deportivo Wanka, perteneciente a la ciudad peruana de Huancayo, pues sufrió un fulminante edema cerebral horas después de finalizar un partido contra el equipo Alianza Lima. Cabe destacar que el jugador carioca marcó un gol ese fatídico día.
Mark-Vivien Foé, futbolista camurunés


Foe, internacional camerunés 64 veces y con 28 años cumplidos disputaba el encuentro de su combinado nacional frente a Colombia, partido válido por las semifinales de la Copa Confederaciones 2003, celebrada en Francia. En el minuto 72 del cotejo y sin ningún adversario cerca, Foe cae hacia adelante con sus pupilas en blanco y convulsionando. Inmediatamente se acerca un jugador de la selección Colombia e intenta reanimarle. Ingresan los paramédicos, pero una hipertrofia ventricular provocó la muerte súbita del mediocampista africano.     
Fehér, futbolista húngaro.


Cuando recién empezaba a despuntar en su carrera, el Lisboa y la Selección de Hungría perdían al delantero estrella. El 25 de enero del 2004 Fehér disputaba un encuentro frente Vitória de Guimaraes, de la Primera División Portuguesa y tuvo una breve discusión con el árbitro por lo que fue amonestado. Luego se alejaría del colegiado visiblemente disgustado para después desvanecerse en la cancha. Aunque trataron de reanimarlo, aproximadamente una hora, Fehér fue declarado muerto a causa de  una tromboembolia pulmonar.
Serginho, futbolista brasileño

Paulo Sergio de Oliveira Silva

El futbolista brasileño, “Serginho”, perteneciente al Sao Caetano, fallece súbitamente cuando su club se enfrentaba a Sao Paulo. Era el minuto 15 de segundo tiempo y sin que el balón estuviera en juego,  se desmayó. A pesar de los esfuerzos médicos nada se pudo hacer por el deportista que falleció a los 30 años.
Víctor Hugo Ávalos, futbolista paraguayo

Víctor Hugo Ávalos

El 2 de abril del 2009, el futbolista paraguayo Víctor Hugo Ávalos, falleció justo en el momento que festejaba su gol convertido en el barrio San Vicente, en Paraguay jugando para el Villa Florida, un club de  aficionados en la ciudad de Asunción. La autopsia reveló un implacable paro cardiaco.
Antonio Puerta, futbolista español.


La afición del club español del Sevilla nunca imaginó que acudir al estadio el 25 de agosto del 2009 para ver a su equipo jugar, les significaría ser testigo del desmayo que  sufrió el futbolista español, de 22 años.
Tres días más tarde, Puerta tendría numerosas paradas cardiacas que derivaron en una displasia arritmogénica (obstrucción del ventrículo) y posterior fallecimiento.
Daniel Jarque, futbolista español


Seleccionado español y gran capitán de su club Espanyol. Ese era Daniel Jarque. 
La escuadra catalana estaba de pretemporada en Italia, debido al término de la Liga Española.
El jugador, de 26 años, padeció un infarto mientras dialogaba con su prometida por teléfono en un hotel de Florencia, donde se encontraba concentrado el equipo.  
Ferran Corominas, compañero de Jarque, llamó rápidamente a los paramédicos que solo pudieron comprobar su deceso.
Piermario Morosini, futbolista italiano


La escuadra del Livorno, el 14 de abril del 2012, se enfrentaba al  Pescara Calcio, de la Serie B italiana. Apenas el cronómetro de juego llegaba a la media hora. Fue en ese momento que el volante Morosini, de 25 años, se sintió con malestar y dejó caer su cuerpo sobre el césped. Inmediatamente los médicos presentes en el estadio, ingresaron a la cancha con un desfibrilador, dándole los primeros auxilios y trasladándolo en ambulancia a una clínica local, en donde a pesar de aplicar la reanimación cardiopulmonar (RCP), una hora más tarde se confirmó su muerte.

 Estos fueron los futbolistas que partieron en la plenitud de sus vidas y carreras dejando un enorme vacío que jamás se compensará. Hasta la próxima.

viernes, 13 de abril de 2012

Anécdota futbolística: La caída del Ángel Rubio


Luciano Re Cicconi, el ángel rubio.


Las ciudades del norte italiano, Milán y Turín, dominaban el panorama futbolístico en el país azurra a través de los equipos Ac Milán, Internazionale y Juventus, respectivamente.

Sin embargo, a inicios de los 70 emergió una escuadra ruda pero práctica en el campo de juego como lo era el conjunto capitalino Lazio, dirigido por el Director Técnico Tommaso Maestrelli, que les valió ganar un Torneo Nacional (1973 - 1974) en donde destacaba un gran mediocampista italiano llamado Luciano ReCecconi apodado “El ángel rubio”-debido a su dorada cabellera- ó el más peculiar apelativo “cuatro pulmones”, haciendo alusión a su despliegue físico – táctico en el terreno de juego.     

Luciano era el “alma” de Lazio, dentro y fuera de la cancha. Un bastión inexpugnable a la hora de regatearlo y ponía la nota jocosa en el vestuario.

Precisamente pagó un alto costo por su forma de ser, siempre lleno de sonrisas y bromas para sus compañeros. Transcurría una tarde tranquila en Roma el 18 de enero de 1977, hasta que a Giorgio Fraticcioli, amigo de Luciano, se le ocurrió gastarle una burla al joyero Bruno Tabocchini con la complicidad del “ángel rubio” y su compañero de equipo, Ghedin.

El joyero, había sido víctima de varios atracos en meses anteriores, por lo que siempre estaba  alerta. Luciano ingresa a la joyería abruptamente y menciona a viva voz: ¡Esto es un asalto. Nadie se mueva! Tabocchini de espaldas al supuesto agresor y decidido a no dejarse “robar” se da media vuelta y lanza un disparo a quemarropa que se coló rápidamente en el tórax del rubio mediocampista, escapándosele la vida en tan solo 20 minutos.

  Días más tarde, en medio de la conmoción italiana por la fatídica muerte del jugador, un tribunal romano absolvía a Bruno Tabocchini alegando defensa propia, a pesar de que la fiscalía pedía 3 años de prisión.

Así, de esta manera absurda y extraña, “el ángel rubio” voló al infinito, con solo 28 años, para hacer sonreír a las creaturas celestiales. Hasta la próxima.